Bien, esta entrada surge al no poder contestar una pregunta en Ask. La pregunta decía así :" ¿Guecuegdas como fue tu pgimeg día en Beauxbatons?" Bien, contar un día es largo, y en ese primer día ocurrieron muchas cosas. Esto fue el comienzo.
<<El sol se alzaba en lo alto del cielo; y la playa al sur de Francia donde se anclaba Beauxbatons parecía brillar con el reflejo de los rayos de sol sobre los cristales de la arena. No debía ser mucho más tarde de las diez de la mañana, pero hacía un calor cómo hacía semanas que no se tenía en Shell Cottage. El aíre tenía ese olor a mar; pero no se podía comparar con el que había en casa, a pesar de ser esto una decisión mía, no podía dejar de pensar que había, por lo menos, una persona en Inglaterra que ahora me estaría llamando. Levante la manga del nuevo uniforme azul y miré el reloj, Louis tenia que acabar de despertarse, y seguro que ahora mismo estaría tomando su tazón de leche y cereales. Una mano en mi hombro logró sacarme de mi ensimismamiento.
-Aller, Victoire!- pronunció ma grand-mère, con ese deje de orgullo en la voz al saber que cursaría en la misma escuela que mi magmi y sus hermanas.
Tanto ella como ma grand-père me miraban con los ojos brillantes, sin dejar de hablar de lo sorprendidos que estuvieron de mi decisión y de que llevara en Francia dos años para perfeccionar mi francés, el que aún tenía un deje de ingles al pronunciar ciertas palabras. A cada paso que dábamos sobre el punte que unía el pequeño promontorio con la costa, el colegio iba apareciendo frente a nuestros ojos; siempre había oído hablar de lo grande y majestuoso que era Beauxbatons; pero no fue hasta que estuve allí frente a sus puertas cuando pude observarlo en todo su esplendor. Las altas torres y las coloridas cristaleras le aportaban un efecto de magnificencia, y cada mínimo detalle que podía observar desde la distancia hacía que mis ojos se abrieran más y más. Si Versalles era perfecto, el castillo de Beauxbatons era simplemente mágico. Al final del puente estaba la entrada de grandes verjas, y allí estaba toda una comitiva de uniformes azules dando gritos de alegría al reencontrarse con viejos amigos. Unos metros antes de entrar me giré y abracé a mis abuelos
- Ma fille, Nous n'avons jamais été si fière de toi comme aujourd'hui- pronunció ma gran-meré como una lápida que me contrajo el pecho- Nous viendrons vous chercher pour Noël; Mais vous pouvez rester si vous voulez - afirmo fijando esos ojos azules cómo el agua en los míos.
Me libre del abrazo de ma grad-meré y mire a ma gran-père esperando unas palabras tan aplastantes como las de ella; pero en vez de saltarme con unos de sus aburridos discursos me abrazó y me dio un beso en la frente como único mensaje. Inspiré un par de veces antes de coger el carrito que llevaba mis tres baúles, de acuerdo que usaría el uniforme del colegio, pero en las clases de ballet quería destacar con todo mi esplendor. Con paso decidido y la cabeza lo más alta que podía me dirigí hacia la valla de hierro; que con algunos remates de oro, delimitaban entrada al colegio; y allí fue cuando la vi a ella. Era altas y esbelta, con el pelo hasta más allá de media espalda que caía suelto, libre tan sólo decorado con un pequeño lazo de color azul celeste, a juego con el uniforme; que por otra parte, parecía hecho a medida para ella, ajustándose allí donde debía y terminando a mitad del muslo dejando que sus piernas quedarán a la vista de todo el mundo. No sabía si ella tendría un antepasado como la bisabuela, pero una cosa era indiscutible, quería ser como ella.
- ¡Arléne! - sonó y ella se giro haciendo que la melena volara de manera que habría derribado hasta a el hombre más estirado. Si, definitivamente, quería ser ella.
Me acerque con decisión a la verja esperando a que unas cuantas estudiantes fueran redistribuidas entre los alumnos mayores para que les enseñaran el castillo. Cuando llego mi turno la mujer que tenía la lista entre las manos me observo detenidamente por encima de las gafas que tenía apoyadas sobre la punta de la nariz.
- Tu es Delacour? - pronunció con una voz aguda y molesta sin preguntarme siquiera si era así o no y comenzó a buscar cuidadosamente entre la lista algo frustrada al no encontrar mi nombre.
- Maintenant oui, mais sera Weasley, Victoire Weasley -pronuncie altiva señalando mi nombre al final de la lista.
- -D'accord, Arléne votre tour - la chica morena se acercó hasta donde estábamos y volvió a analizarme con esa autosuficiencia latente con la que yo la miraba a ella, antes de sonreír planeando algo que todavía yo no llegaba a comprender
- Aller, infructueux, Je n'ai pas toute la journée.
- Ne jamais m'appeler comme ça. >>
Muy bueno, me gusta mucho.
ResponderEliminarUn consejo: ponte un gadget de seguidores para que nos podamos suscribir a tu blog :33 avísame en el próximo! Y pásate por el mío cuando quieras! <3
Tomo nota; y espero poder encontrarlo, aunque en esto de las tecnologías muggles no es que sea muy buena. Gracias por comentar de nuevo.
EliminarBesos, Vic